

Enciendes la TV, pones Fox Sports para ver algún partido de soccer en la mañana de un domingo aburrido, y te topas con ‘kinkones’ azotándose de frente unos a otros. Los ves con un balón que ni forma tiene, cascos que protegen esas golpizas que se dan, y lo que pareciera que son unos chalecos antibalas. Reforzados. Como si fueran metales dentro de una camisa. Robots, eso parecen.
Acto seguido, intentas quedarte a ver un poco. Sale el tiempo de juego en la TV y quedas ‘gringo’. Dice “4TH /// 14:43 /// 2nd & 12” y no entendés nada de lo que dice ahí. Coges el control y pasás de canal. Esto es lo más habitual en lugares donde el fútbol americano no es tan común, por allá donde pareciera que lo transmiten sólo porque algunos canales reciben compensación económica.
Pero no, no es tan complicado como parece. Es un deporte norteamericano que surgió por allá en el siglo 19, y si bien es parecido al Rugby, no tienen el mismo estilo de juego. Son completamente distintos.
El fútbol americano se juega con dos equipos de 45 jugadores cada uno. Entre ellos se reparten los jugadores ofensivos, los defensivos y los de equipos especiales. Cada uno de esos tres tiene una particularidad, una visión de juego y un objetivo distintos. En la cancha debe haber 11 jugadores por equipo, para un total de 22 en el terreno de juego.
Llaman a los 5 capitanes de juego de cada equipo, y el referee sortea quién sale a defender, y quién a ofender. Ya pasó, se eligieron los equipos y salen en búsqueda de sus posiciones. Suena el pito y salen los ofensivos de un equipo y salen los de equipos especiales del otro equipo. Los que ganaron la ofensiva esperan mientras se pone en la yarda 20 el balón para que el pateador salga a golpearlo. La idea es llevarlo lo más lejano posible a la cancha. Esta suele medir 100 yardas. Al otro lado del terreno el otro equipo sale en búsqueda del balón. Cuando alguno lo agarra, tiene la posibilidad de llevarlo lo más cerca posible a territorio contrincante. Los jugadores deben cuidar que su compañero lleve lo más lejos posible el ovoide, o llevarlo a la llamada ‘zona de anotación’, lugar donde se hacen los touchdowns.
Uno de los jugadores del equipo especial arremete contra el ofensivo y el balón toca suelo en la yarda 40. Ahí se hace cambio de equipos. Los especiales salen y entran los 11 defensivos. En el fútbol americano hay cuatro tiempos divididos en 15 minutos cada uno. La particularidad es que arranca el reloj cuando se levanta el balón del suelo, y apenas vuelva a tocar césped se detiene el tiempo. Además, cada equipo tiene cuatro oportunidades de avanzar 10 yardas. Si antes de las cuatro eso se logra, se le suman otras 4 posibilidades para seguir avanzando al objetivo, anotar un touchdown.
Suena el pitido del referee y el mariscal de campo dice las claves. Cada equipo tiene un libro de juego, el cual está denominado por las jugadas que se crean en los entrenamientos. La particularidad de esto es que suelen ser colores para definir el tipo de jugada, seguida de un número para definir el jugador a quien va dirigido el balón, claro que pueden cambiar a nombres de ciudades, objetos, etc.
¡ROJO 47! Grita el mariscal, quien suele ser el dueño del juego, el de las ideas y de la cabeza fría. En la línea primaria están los jugadores más fuertes y grandes, para lograr detener a los defensivos hasta que el mariscal de campo pueda lanzar su balón, o en su defecto, lo pase a algún corredor cercano. El balón pasa por entre las piernas del línea central y le llega a las manos al Quarterback (mariscal) y este mira de lleno el campo de juego. Es 1ra (oportunidad) y 10 (yardas). Cuando alcanza a ver a su 47 (jugador que recibe el balón) lo lanza. El receptor lo recibe saltando, pero al agarrar el balón lo tacklea (golpea de la cintura para abajo) un jugador defensivo, denominado ‘cornerback’.
¡Enhorabuena!, el balón superó las 10 yardas, se detiene el tiempo, y se organizan de nuevo los jugadores. Se forma de nuevo la línea, pero esta vez en la yarda en la que el balón tocó el suelo. ¿Ahora sí se entiende mucho mejor el “4TH /// 14:43 /// 2nd & 12”? El primer número es el cuarto de juego en el que están. El segundo fragmento es el tiempo que resta para acabarse ese cuarto, y el tercer fragmento es el número de oportunidades que tienen y las yardas que deberían pasar para lograr otro 1 y 10. En el caso del partido acá narrado sería “1ST /// 14:50 /// 1 & 10”.
Cuando se acaban las oportunidades y no se logró pasar la yarda especificada, hacen cambio de equipos. El equipo ofensivo cambia con el defensivo, y el equipo defensivo cambia por el ofensivo. Sólo que esta vez irían hacia el campo contrario. Tienen objetivos distintos: uno anotar, y el otro evitarlo.
Hay, entre los juegos, flags. Bandera, en español. Estas son lanzadas por alguno de los árbitros del juego que vean alguna irregularidad, entre las que están agarrar el casco del oponente, golpear en la zona genital, agarrar la camisa de un jugador, que se digan palabras soeces los jugadores entre sí, etc.
Las formas de anotación son tres: Llevar el balón a la zona de anotación, que adjudica seis (6) puntos al equipo (Touchdown), o patear el balón, en la cuarta oportunidad, entre los dos postes que están sobre la zona de anotación… esto da tres (3) puntos (Field goal). Después de hacer un touchdown, el equipo tiene la posibilidad de volver a formar para, o patear el balón y sumar un (1) punto más si pasa entre los postes, o generar otro touchdown, que ya no daría seis (6) puntos sino que se hace una conversión de dos (2). Como todo, gana el equipo que más puntos tenga.
Con esto ya no tienes que pasar el canal del partido que estén transmitiendo el domingo en la mañana, o el lunes y el jueves en las noches. Sólo ten ésta columna a la mano, e intenta entenderlo. Es más fácil de lo que parece.