¡Quédate y no te vayas, no seas un cobarde!

Por: Alejandro Gil Torres

Unos lo han hecho y quizás otros se han enfrentado a esta etapa inesperada e inexplicable de las relaciones: el Ghosting.

Derivado de ghost (del inglés, fantasma) consiste en terminar una relación emotiva sin ninguna explicación, trayendo como efecto muchas inquietudes, entre esas: ¿qué ocurrió? ¿Qué provoqué para que esto pasara? Muchos interrogantes, pocas respuestas.

Últimamente esta práctica se está volviendo común, especialmente en las redes sociales donde hay una ilusión de por medio: encontrar el amor de nuestra vida. Las apps de citas o plataformas que incluyen estos chats para ‘conocer’ personas, poco a poco se van convirtiendo en terrenos con retornos no tan agradables. Por lo tanto, la empatía y el amor son dos sentimientos, que bajo mi consideración, no pertenecen a este tipo de espacios, debido a una conclusión contundente: la demanda es mucho más elevada que la oferta.

El Ghosting no maneja un género en específico, es decir que no hay mayor probabilidad de que un hombre o una mujer tomen esta decisión tan cobarde, porque así se denomina: cobardía, ausencia de valentía, empatía y madurez. No hay que ser la persona más lógica para comprender que esta situación refleja una inseguridad profunda y un desorden emocional. Pero, ¿a qué se debe? ¿Por qué razón se toma la decisión de acabar con una ´relación´ y no dar una justificación? La respuesta es tan sencilla como ponerse un condón o preparar un sándwich: no hay determinación. No se sabe qué se pretende con esa persona, ¿será que quiere solo sexo, un beso, ser amigos o incluso, mantener una relación seria?, pero no sabe cómo manejarla y no se acude a los sabios consejos de algún familiar, amigo o incluso, un profesor. Por esta razón, es muy frecuente presenciar la desactivación del ‘visto’ en WhatsApp o la verificación de mensaje en azul, las llamadas perdidas o el terreno en el que nadie quiere ingresar: el bloqueo.

Navegar por aguas tóxicas; así se podría denominar lo que uno hace cuando nuestra mentalidad está nublada y se autoevalúa sobre las decisiones que tomó la otra persona con la que ‘supuestamente’ estábamos enamorados. Aún no comprendo el grado de desgaste y sacrificios impertinentes que llegamos a hacer por un ser humano. Por otro lado, cuando se está navegando se pueden presentar olas que impiden continuar con nuestro viaje hacia la orilla de la sensatez, esos obstáculos los podríamos denominar apego, muy similar a un ancla que impide proseguir hacia la estabilidad mental tan deseada.

Previamente, resaltaba el objetivo de muchos usuarios al utilizar alguna app de citas. Antes de plantearse esta aspiración: ¿ya te cuestionaste frente a tu amor propio? ¿Te amas lo suficiente para querer mantener aunque sea una relación sexual con alguien?, si es así, adelante, disfrútalo. De lo contrario, ya se conoce que debido a lo anterior, el desaparecerse como un cobarde podría seguir prevaleciendo en tus acciones. El Ghosting deja mala fama entre sus aliados, en vez de eso, invítate a ser más valiente y expresar tus sentimientos de una forma transparente y segura. Los jóvenes defendemos la verdad, ojalá que en el amor y en los espacios tecnológicos se mantenga esa coherencia.