Por: Juan Manuel Obregón G.

Después de más de un año de esta terrible pandemia, de un año y medio de las nuevas administraciones locales y sus corporaciones, y ya casi tres años de los actuales congresistas, he visto como la utilización de las redes sociales y los medios de comunicación virtuales, remotos u online, han crecido exponencialmente.

Sin embargo, en la medida que la participación de nuestros políticos y dirigentes en las redes sociales y a través de los medios virtuales, hacen más y continua presencia, el contenido de los mismos evidencia un pobre conocimiento de la estructura del estado y de las finanzas públicas, y un erróneo entendimiento de la pertinencia de las políticas públicas, lo que lamentablemente evidencia la paupérrima gestión de la mayoría de los cabildantes de Cali y de los congresistas del Valle del Cauca.

Es cierto, y es algo que nos estamos acostumbrando a ver previo a las elecciones del próximo año, concejales, congresistas y candidatos, “elaborando” contenidos digitales, muy buenos, por cierto, tratando de llamar la atención con el fin de ir labrando el camino de las candidaturas del próximo año, pero carentes de conocimiento, experiencia y pertinencia. Contenidos digitales sin nada más que un cascarón.

Prueba de ello, es el concejo actual de Cali, en casi año y medio de esta terrible pandemia, no ha tenido una sola propuesta de acuerdo distrital o de política pública, en pro de la salud de los caleños, de la reactivación económica y la disminución del empleo, al punto, que ni siquiera se han atrevido a conminar de manera categórica a la administración distrital por un plan de austeridad del gasto, y en cambio siguen aprobando créditos y vigencias futuras que endeudan peligrosamente al distrito de Cali, para financiar un gasto público que cada día se hace insostenible.

Pregunto, ¿Qué clase de concejales hemos elegido? ¿Qué clase de congresistas vamos a elegir?, influencers de las redes sociales, sin más contenido que algunos videos, fotos y uno que otro texto en Twitter, Instagram o Facebook. Sin conocimiento alguno de temas tan importantes para la ciudad y los caleños, como finanzas públicas, políticas públicas, gobierno, salud o educación. Por eso, no salimos del hueco en que la pandemia nos metió y no saldremos, hasta que personas inmersas en el entendimiento del manejo de las estructuras del estado o con basta experiencia en ella, sean elegidos.

Nos merecemos lo que tenemos si me lo preguntan, pero las circunstancias y la supervivencia de nosotros mismo, nos invita a iniciar nuevamente, por lo tanto creo que podemos seguir las redes sociales de estos concejales, congresistas, dirigentes o candidatos, son hasta divertidos, pero son circo, sin menospreciar este oficio tan digno que se niega a morir, pero no podemos volver a elegirlos o votar el próximo año por cascarones con ideas chimbas, sin conocimiento profundo de las finanzas y políticas públicas, sin carácter para defender al ciudadano y a la ciudad, y sin la experiencia en la cosa pública.