Cada vez que escucho en la calle que alguna persona no quiere vacunarse, estando en el rango de edad mínimo para ello, o teniendo alguna comorbilidad, me hierve la sangre. Me da pena, no de vergüenza (en Colombia así lo asimilamos, sabrá Dios por qué), sino del sentimiento de tristeza… y se me nubla la conciencia y empiezo a maldecir todo. Me entra una ira casi insostenible en este escuálido cuerpo. ¿Por qué no se vacunan? Mera indiferencia, desinformación, y pura ignorancia, en la mayoría de los casos con los que me he topado.

Cuánto quisiera yo por vacunarme, y sentirme un poco menos vulnerable. Así sea un 50% de efectividad en alguna vacuna, pero es un 50% menos de probabilidades de caer en una cama UCI, o de morir. Y eso ya es ganancia.

Y es que veo en las noticias cómo se alarman los mandatarios locales al notar que no se cumple con la vacunación requerida para lograr el objetivo de inmunidad de rebaño a final de este año, y me da es tristeza. ¿Qué tal que cobraran por estas vacunas? Estoy seguro que ahí sí miles, qué digo miles, millones de colombianos estarían haciendo filas de horas y horas para vacunarse. Porque así trabaja nuestro cerebro. Así estamos acostumbrados en Colombia… a que nos cobren por todo, y lo gratis lo vemos con ojos de desprecio.

¿Por qué entonces no se toman medidas frente a esto? Me explico, si se supone que los jóvenes son los más irresponsables, a la luz de los Medios Masivos de Comunicación, MMC, y de los gobernantes, ¿Por qué no adelantar jornadas de vacunación para nosotros? Estoy seguro de que la gran mayoría de jóvenes nos vacunaríamos, sin pensarlo dos veces. Sea con la vacuna que haya, porque pensamos es en nuestro futuro, y en proteger a los nuestros. Pero no, el argumento es que debemos quedarnos en casa, cuidando a nuestros padres y abuelos (en algunos casos bisabuelos), cuando ya sabemos que el ciudadano colombiano es amante a no seguir las reglas, claro que no en todos los casos.

Sigo diciendo que deberían permitir la vacunación para todos. Para todos aquellos que estén de acuerdo con los índices de vacunación mundial, que estén de acuerdo con las tasas de contagios que se reducen día a día gracias a las dosis aplicadas y los esquemas de vacunación completos, y que estén de acuerdo con cualquiera de los porcentajes de efectividad. Porque si seguimos esperando, la gente se va a ir relajando. Ya sabemos cómo funciona Colombia. Vivimos acá, y lo hemos notado por toda nuestra vida.

Igual, poco a poco los altos mandos de este circo van bajando el rango de edad. Hoy, 23 de julio, amanecimos con la noticia de que los mayores de 30 años pueden acercarse a los centros de vacunación para iniciar con su inmunización. ¿Por qué esperar 2 meses a permitirlo para cualquier mayor de edad? ¿No se supone que semana a semana están llegando de a 500.000 vacunas? Porque eso sí lo mantienen alardeando en redes sociales y en el programita de Duque.

Los dejo entonces con esta pregunta… ¿Por qué alargar lo inevitable?