
Cuestionar es aquello que realmente nos hace libres
Por: Jonathan David Tangarife Quintero.
Hoy me senté a escribir con la intención principal de dejar que mis manos fluyan sobre el teclado. Soy de los que dicen que es mejor no forzar nada y permitir que las cosas ocurran por sí solas, si es que han de ocurrir. Esta es una mentalidad que he ido adoptando con el pasar de los años, así como el hecho de cuestionar constantemente varios de los aspectos que me rodean: desde el más “insignificante” hasta el más complejo. Y créanme, esto me ha ayudado a ver la vida de una manera diferente.
También te puede interesar: Sé la mejor versión de ti mismo
Desde que tengo uso de razón, me he caracterizado por tener, en muchos casos, poco control sobre mi mente, esto debido a que en mi infancia fui diagnosticado con el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), el cual, en lo personal, se suele ver reflejado principalmente en el poder que mi mente es capaz de ejercer sobre mí, llegando a ponerme en situaciones realmente estresantes y frustrantes en las que siento que mi cerebro me controla a mí, y no al revés, como se supone que debería ser; estoy seguro de que las personas que padecen el mismo trastorno entienden perfectamente a lo que me refiero, ya que he podido comprobarlo hablando personalmente con algunas de ellas y viendo entrevistas de famosos que están en la misma situación que yo, como el freestyler español Pablo Pérez, más conocido como Blon.
Pues bien, de unos años para acá he intentado usar cada vez más a mi favor ese poder mental que he mencionado anteriormente, logrando así ser partícipe del arte de cuestionarlo todo, de filosofar conmigo mismo y, cuando se puede, con alguien más que comparta ese tipo de intereses con mi persona. Gracias a esta clase de introspección, he logrado forjar un carácter, una personalidad y una postura personal con respecto a muchos temas que considero importantes, tales como: ¿qué es la vida? ¿En qué consiste la felicidad? ¿Qué necesito para ser feliz? ¿Qué o quién es el Dios en el que creo y por qué creo en él? ¿Existe o no algún tipo de Nuevo Orden Mundial?, entre otros interrogantes que poco a poco he ido autorespondiéndome.
Este asunto de intentar cuestionarlo todo también me ha ayudado a abrir los ojos acerca de varios aspectos que aparentemente ya están diseñados para ser comprendidos de una manera en particular, lo que me ha impulsado a realizarme preguntas como: ¿a través de las redes sociales los grandes poderosos mundiales buscan controlarnos, manipularnos y abstraernos de la realidad? Si es así, ¿entonces la solución es dejar de consumir contenidos a través de ellas? En este caso, mi respuesta a la primera pregunta es que sí, pero para la segunda mi respuesta es negativa, ya que pienso que todo lo que nos rodea es aprovechable por el ser humano para llevar a cabo buenas acciones con las diferentes herramientas que tenemos a nuestra disposición, tales como las redes sociales, las cuales, si son usadas de manera correcta y prudente, nos pueden ayudar a abrir más aún los ojos sobre ciertos temas por medio de la información que podemos consumir y suministrar a través de ellas.
Muchos de ustedes dirán: “Qué man tan conspiranoico, dizque ‘Nuevo Orden Mundial’, dizque las redes sociales están hechas para manipular; puro cuento”, y es respetable que piensen así, siempre y cuando realicen el mismo proceso de introspección y cuestionamiento antes de arrojar ese tipo de conclusiones; ya que a eso me refiero cuando digo que cuestionar todo lo que nos rodea es aquello que realmente nos hace libres: cuando tomas posturas, tienes opiniones y crees o no en determinados asuntos sin permitir que nada ni nadie influya en ese proceso previo de interiorización, estás siendo libre, estás dejándote guiar por tus propias convicciones y no por lo que alguien o algo más desea que pienses y sientas. Luego, todos estos pensamientos deben pasar a la acción, estando plenamente convencido de que vale la pena luchar por lo que te propones, porque dichos objetivos provienen de aquello en lo que crees, de aquello que sientes.
Hago un llamado a que todos hagamos lo que esté en nuestras manos para salirnos del sistema que se nos intenta imponer a través de todo lo perceptible e imperceptible, no seamos más esa sociedad sonsa que sirve como marioneta y como conejillo de Indias para ciertos magnates que nos utilizan a placer. Vivamos la vida que en realidad queremos vivir, creamos en lo que queramos creer, seamos felices a nuestra manera, encontrémosle sentido a nuestra vida y descubramos cuál es el propósito de nuestra existencia, solo así podremos decir, algún día, que realmente supimos ser libres.
También te puede interesar: Sé la mejor versión de ti mismo
