Camila acaba de graduarse de Comunicación, pero a diferencia de sus compañeros de promoción, siempre se ha sentido a gusto con los números. Para ella sacar números de los datos es como ver el código fuente con el se escribió el mundo, algo así como lo que siente Neo (Matrix Reloaded, 2003) cuando ve brillantes caracteres verdes mientras los demás no tienen más opción que creer lo que les diga el Merovingio (con quién sabe qué intenciones). Allí busca pistas sobre el mundo real cuando la incertidumbre la acecha.  

Y la incertidumbre tiene nombre propio, ya que como muchos de sus compañeros, Camila leyó la columna de Mabel Lara donde da cuenta de una realidad que ya se veía venir: ya hay demasiados periodistas y pocos empleos para ellos. Hasta titanes del periodismo como Claudia Palacios todavía tienen dificultades para encontrar ese punto medio entre los extremos del escándalo y el entretenimiento desde donde se pueda hacer un periodismo que nos beneficie a todos y no solamente a los anunciantes y dueños de los medios.

Echando mano de las herramientas que tiene, Camila estima sus probabilidades de encontrar un trabajo en Cali que pague más del salario mínimo.  Empieza por descargar los datos de la gran encuesta integrada de hogares 2018 del DANE (microdatos.dane.gov.co) y usa una muestra de solo Diciembre. Aunque puede analizar los datos sin problema en Excel, Camila quiere combinar datos demográficos (sexo, edad, grado académico) con datos laborales (como ingreso, actividad económica, si está ocupado o inactivo), por lo que prefiere hacerlo en Orange, una herramienta libre para ciencias de datos. Después de combinar y filtrar los datos conectando y configurando componentes gráficos, Camila obtiene el siguiente resultado: 

Fuente: elaboración propia usando Orange

Camila concluye que aunque en población las mujeres son mayoría, en el mercado laboral representan solamente el 46% de la muestra. Además, que entre quienes ganan más del salario mínimo, solamente 39% son mujeres. Sin ahondar más en los datos, este cálculo rápido sugiere que sus probabilidades de encontrar un trabajo que pague más del mínimo siendo mujer son apenas del 20%.

Sin embargo, únicamente por haber sido capaz de llegar a esa conclusión usando datos públicos y herramientas tecnológicas, Camila no solamente puede nivelar esas probabilidades sino incluso superar a muchos que estudiaron Comunicación principalmente porque no tenían que ver matemáticas.