septiembre 5, 2019

En una reciente columna el profe Juan Manuel Obregón se preguntaba si la culpa de nuestro desastre ambiental es que somos muchos. Para responder usando datos planteamos la pregunta como hipótesis, como por ejemplo que el cambio climático es directamente proporcional a la cantidad de población humana sobre el planeta. Para probar o refutar la hipótesis, usamos datos como el de las emisiones de CO2 a 2014 (uno de los indicadores asociados al cambio climático) y la población de cada país a 2019.

Por un lado, estamos muy mal repartidos. Los dos primeros países más poblados suman el 36% del mundo (China 18.59%, India 17.71%) mientras que los siete que le siguen suman entre todos apenas el 20% (Estados Unidos, Indonesia, Paquistán, Brasil, Nigeria, Bangladesh y Rusia). Así que si todavía no encuentra el amor de su vida, debería pasarse por China e India.

Fuente: Elaboración propia con datos de Worldmeters de 2019

Pero volviendo a nuestra hipótesis, los países más contaminantes deberían ser los mismos con mayor población. Sin embargo, aunque China, Estados Unidos, India y Rusia vuelven a estar entre los 10 primeros emisiones de CO2, hay que bajar bastante en la lista para encontrar los otros países más poblados: Indonesia (13), Paquistán (33), Brasil (12), Nigeria (40) y Bangladesh (46, por debajo incluso de Colombia). En otras palabras, no se evidencia que a mayor población se emite más CO2, y la hipótesis se rechaza.

Fuente: Elaboración propia con datos de 2014 del CAIT World Resources Institute

Algo más está pasando y necesitamos una nueva hipótesis. Ya que quienes lideran la lista de emisores de CO2 son potencias económicas, tal vez la contaminación tenga más que ver con el estilo de vida de sus habitantes que con su cantidad.

En cuanto a población encontramos que de los nueve primeros, cinco tienen menos del 56% de su habitantes viviendo en áreas urbanas (India y Paquistán llegan apenas al 35%), lo cual explica que Indonesia, Paquistán, Nigeria y Bangladesh, teniendo tan grandes poblaciones, aparezcan tan abajo en la lista de emisores de CO2.

Si cruzamos nuestros datos con el poder adquisitivo promedio de los habitantes de cada país (lo inferimos del Producto Interno Bruto per cápita), evidenciamos que Estados Unidos y Canadá son los países que, de lejos, contaminan más en proporción a su población, siendo también los más ricos de los países que lideran la lista de emisores de CO2. Además, hacen parte de los países con más proporción de población urbana. Por el contrario, el chino e indio promedio contamina mucho menos que el norteamericano promedio, lo cual es consistente con que una gran parte de su enorme población vive en áreas rurales con muy poco dinero.

Fuente: Elaboración propia con datos de 2019 del Banco Mundial.

En conclusión, más que la población en sí, el problema parece estar en que la gente con mayor poder económico se concentra en las ciudades, donde usan mucho transporte para traer comida (África y Latinoamérica) y productos (China), para desplazarse en vehículos altamente contaminantes como carros y aviones, y gastando energía en verano (aire acondicionado) e invierno (calefacción). Todos debemos hacer sacrificios para salvarnos del desastre, pero hay que empezar por donde aportan más.