julio 23, 2019

El desplazamiento de la fauna silvestre en el sur de Cali por varias construcciones está siendo un problema diario en incremento. Ciudadanos y entidades ambientales intentan solucionar el desalojo y resguardar a los animales, pero la comunicación y atención entre ambos al rescatar puede ser difícil, rota y hasta nula…

La campaña ciudadana #LaSucursalDeLasZarigüeyas no para de denunciar el peligro que viven iguanas, guatines y zarigüeyas al ser desalojados de su hábitat natural, por las diversas construcciones de MetroCali y la Secretaría de Infraestructura. “También hay que resaltar las construcciones residenciales de algunas constructoras inmobiliarias…”, afirmó el biólogo de la CVC, Gustavo Trujillo.  Estas criaturas llegan a barrios como El Caney, Valle del Lili, Ciudad 2000, El Ingenio y muchas de ellas mueren por atropello, maltrato e incluso caza, principalmente las Zarigüeyas, más conocidas como ‘Chuchas’.

Ciudadanos reportan los casos de avistamiento o maltrato animal en las redes sociales, a animalistas y entidades ambientales. Pero, el contacto ciudadano – entidad, entidad – ciudadano, resulta difícil o ‘imposible’ ya que las líneas de atención no se usan, están obsoletas o no responden, ya sea una parte u otra. Provoca desconfianza y desacuerdo entre ellos.

Es decir, “cuando se ofrecen las líneas de atención nadie llama, sólo denuncian por las redes y es difícil hacer un seguimiento del caso” mencionó la CVC. Por otro lado, “muchos caleños no confían en el CVC y Dagma porque nunca responden o no tienen una red 24/7” aseguró el rescatista Davis Travis.

Cabe preguntarse: si la intención de ayudar y resguardar a los animales es mutua, ¿Por qué es tan difícil acordar un buen rescate y resguardo animal ciudadano?

“Llamar, pero no saber a quién…”

Imagina que te encuentras un animalito lastimado o resguardándose. Quieres ayudar, pero no sabes cómo. Llamas a la policía ambiental, no llega. Llamas a la CVC o al Dagma, manda a buzón. Recurres a los vecinos, pero reaccionan con violencia al animal o están igual que tú. Y atraparlo provocaría algo peor para ti o la criatura. Tampoco sabes de algún rescatista o animalista.

Pasa el tiempo y el único en peligro es el animalito que, por ignorancia, falta de empatía y miedo no obtiene la ayuda que merece…

La CVC y el Dagma han manifestado que, a pesar de ofrecer la línea de ayuda, esta no es en gran parte utilizada por la ciudadanía. “Recibimos de 10 a 100 denuncias aprox. en comparación con las que se comparten en redes sociales que superan los 150 casos públicos”, comentaron funcionarios. Sin embargo, las denuncias en redes sociales no se revisan correctamente debido a la difusión confusa y masiva de otros usuarios.

Una de las posibles razones de la poca eficiencia de las líneas de atención de las entidades ambientales (CVC, Dagma, Policía ambiental) es que el medio de comunicación que más utilizan es un número telefónico, en vez de una plataforma TIC programada para el resguardo animal, así lo aseguró el fundador de ‘La Casita del Bosque’, Davis Travis.

Estas entidades ofrecen un teléfono pero no siempre atienden y no está disponible las 24 horas del día; es un medio obsoleto, no se pueden dar descripciones específicas del animal a tratar como sí se podría con una fotografía si tan solo priorizaran los medios multimedia como contacto… se brindaría una idea detallada de cada caso animal con pautas básicas para preservar su vida mientras lo ayudan profesionalmente… a veces la gente del común no hace diferencia entre una paloma y un ave rapaz, por ejemplo.”, comentó Travis.

Fotografía por: Davis Travis

Rocío Selene Ruiz, presidenta de la JAC Urbanización Valle del Lili, mencionó que la comunidad del barrio considera que, a pesar de que se han comunicado con la Policía Ambiental, esta no ha brindado la atención suficiente a los llamados”.

“La policía ambiental no se ha puesto en contacto con nosotros, y el sólo hecho de que la CVC otorgue unos permisos de construcción en el Humedal El Cortejo y el ‘bosque seco tropical’, son obras improvisadas sin un plan de manejo de flora y fauna adecuado. Es un llamado de atención a defender el medio ambiente”.

Finalmente, si bien muchos ciudadanos locales avisan avistamientos y maltrato animal, existe otra parte de la población que desconoce qué son y a qué especie pertenecen. Es evidente un desconocimiento social y animal entre co-habitantes en el sur de Cali de especies tales como las zarigüeyas. Por su parecido roedor (rata), Ruiz afirma que personas han optado por capturarlas, asesinarlas y comérselas sin percatarse de las consecuencias, daño ambiental y tipo de animal que es este marsupial, en principio.

Mejoras necesarias

Si la ciudadanía y entidades ambientales queremos rescates efectivos y buena protección animal, esto depende de:

  • Educación: culturizar la ciudadanía, aclarar las dudas, jornadas y campañas de aprendizaje en el que se presenten a la fauna silvestre como habitantes de la ciudad y qué tipos existen.
  • Uso de TIC y comunicaciones efectivas: inversión en líneas de comunicación multimediales y en línea, disposición de la información a la comunidad y respuesta pronta de entidades y ciudadanos.
  • Velación y cooperación municipal: Presencia y atención a los llamados de auxilio de ambas partes, cooperación grupal, y verdadera priorización del peligro, valor y cuidado de los animales silvestres. No hay que vivir en la ignorancia para siempre.

En estos tiempos en el que cuidar el planeta es urgente y necesario, nada mejor que saber quiénes son y cuidar a nuestros compañeros de hábitat… los primeros que llegaron. La importancia ya no la tiene la humanidad.

“Todos han llegado de huída. Dejando el camino de los muertos. Pero quieren seguir viviendo y les toca aceptar la vida como viene…” – Alfredo Molano.

ADVERTENCIA:

Cada que veas una zarigüeya herida o asesinada, procura revisar su marsupio (bolsa materna), quizá tiene bebés dentro. Acógelos y abrígalos con cobijas y agua tibia para conservar temperatura caliente. También, aliméntalos con leche descremada, apta para su organismo.

Teléfonos de atención animal:

Davis Travis, rescatista y animalista: 3165346363

Policía ambiental de Cali: 3004592472, 8826115, 123.

DAGMA: 6530869