14-agosto-2020.

Por: Francisco José Pérez Rojas.

El fútbol caleño y en general de nuestro país sigue de luto, el ex técnico, jugador y médico Gabriel Ochoa Uribe, falleció el pasado sábado en la “Sultana del Valle” a la edad de 90 años. Reconocido por su disciplina y su preparación atenta de cada partido, quedará inmortalizado para siempre como el técnico más ganador del campeonato nacional, al lograr 14 títulos con Millonarios, Santa Fe y América de Cali. 

Primeros años y debut en el fútbol

El médico Ochoa Uribe nació en Sopetrán (Antioquia), a sus 17 años arribó al América de Cali para asumir la custodia del arco ‘Escarlata’. En la escuadra jugó tres años, hasta dar el salto a finales de 1948 a la capital para jugar en Millonarios. Con el equipo ‘Embajador’ conquistó cuatro títulos locales (1949-1953) y una copa ColombiaDe ahí tuvo un breve paso por el fútbol del exterior, cuando jugó en Brasil con el club América de Río de Janeiro, antes de volver a Millonarios y retirarse en 1958 para asumir el comienzo de su premiada carrera como entrenador.

De director técnico, continúo ganando títulos con el equipo azul capitalino, llegando incluso a una semifinal de copa Libertadores (primer entrenador en llevar a un equipo cafetero a esa instancia). Tiempo después cruzó la vereda y se fue al Santa Fe, equipo que sacó campeón en 1966 y continuó hasta la década de los 70 antes de volver nuevamente a Millonarios y permanecer hasta retirarse transitoriamente en 1977.

Maldición del Garabato y su regreso al América de Cali

En el año 1979 volvió a la casa que lo vio debutar, y le encargaron la misión de acabar con la maldición del Garabato. Benjamín Urrea, apodado el Garabato debido a su aspecto físico, aseguró en 1948: “que lo vuelvan profesional, que hagan del América lo que quieran, pero juro por mi Dios que nunca serán campeones”por más de 31 años la profecía no se pudo romper, hasta que Ochoa Uribe llegó y dio la primera alegría al cuadro americano. A partir de ese título, comenzó la seguidilla de conquistas locales al ganar cinco campeonatos entre 1982 y 1986, récord que ostenta todavía en la liga colombiana, y tres finales de libertadores entre 1985 y 1987, las cuales no pudo ganar. Finalmente le dijo adiós al fútbol para siempre en 1991.

Rivalidad con Vladimir Popovic

Durante la década de los 80, los clásicos entre ‘Escarlatas’ y ‘Azucareros’ hacían honor a la frase de la canción ‘Cali Pachanguero’ del grupo Niche: “Un clásico en el Pascual, adornado de mujeres sin par, América y Cali a ganar, Aquí no se puede empatar”. En esa época, América de Cali era comandando por Ochoa Uribe y su rival de patio, el Deportivo Cali, era dirigido por el serbio Vladimir Popovic, por lo que cada partido era garantía de que ambos conjuntos dieran lo mejor de sí tanto en la cancha como en el banquillo de cada escuadra. Curiosamente y como si se tratará de un acuerdo no escrito entre ambos entrenadores, Popovic falleció en Serbia días después para continuar en el cielo, la rivalidad entre ambos entrenadores.

Siempre recordaremos a Gabriel Ochoa Uribe, un entrenador temperamental, disciplinado y muy exitoso. Y lo homenajeamos por su aporte al fútbol local y nacional, sin duda alguna pasará mucho tiempo antes de poder ver a otro director técnico como el Doctor Ochoa Uribe. Paz en su tumba.