Los alimentos, aunque siguen altos, registraron una baja sensible y, por primera vez en más de medio año, no encabezan la lista de los rubros que más subieron.

Desde abril de 2021 el país ha experimentado, en promedio, una escalada constante en el aumento de la carestía, alcanzando en el mes de marzo su variación anual (es decir, en los últimos doce meses) más alta en décadas, la cual fue del 13,34 %. Este viernes las noticias son, cuanto menos, alentadoras, pues la tasa registró una leve caída, cerrando abril con una inflación anual del 12,82 %.

Si se compara esta variación anual, con la registrada en marzo del presente año (que fue del 13,34 %), se evidencia una reducción de 0,52 puntos porcentuales; si se repite el ejercicio con la variación mensual, la disminución fue de 0,27 puntos porcentuales. En suma, y aunque leve, la inflación comenzó a caer en Colombia.

Si la carestía de los principales productos y servicios que componen la canasta básica familiar continúa la senda prevista por parte de los principales analistas, se espera que hacia finales del próximo año el país alcance la meta de tener una inflación cercana al 3 %. Parte de los esfuerzos adelantados para alcanzar este ajuste económico los ha hecho el Banco de la República, mediante el alza de tasas. Con esto se ha buscado disminuir la demanda (al encarecer el crédito) para así estabilizar o disminuir los precios.

Los alimentos fueron los protagonistas de la jornada

Variación del IPC por divisiones de bienes y servicios – Abril, 2023 – Variación anual

Aunque la incidencia de los alimentos y bebidas no alcohólicas en la inflación sigue siendo considerable, se puede decir que el gran ganador de la jornada, pues hay que recordar que era la división de gasto que más estaba repuntando en la inflación. En abril, y en su variación anual, esta dejó de ocupar el primer lugar, mismo en el que quedó el rubro de restaurantes y hoteles.

Es así como las cinco divisiones de gasto que más aportaron en la subida de los precios fueron restaurantes y hoteles (18,60 %), alimentos y bebidas no alcohólicas (18,47 %), transporte (16,75 %), artículos para el hogar (15,97 %) y bienes y servicios diversos (15,26 %).

No obstante, los alimentos sí continúan siendo la división de gasto que más presiona a la inflación, pues en abril aportó 3,84 puntos porcentuales a la cifra de variación anual que, recordemos, fue del 12,82 %. A esta la siguieron alojamiento, agua, electricidad, gas y otros servicios (2,53 p.p.), transporte (2,12 % p.p.), restaurantes y hoteles (1,88 p.p) y bienes y servicios diversos (0,80 p.p.).

Aunque, de nuevo, la presión de los alimentos sigue siendo considerable, en el último año se han registrado reducciones importantes en algunos productos. Ejemplo de esto es el tomate, que consolidó una caída del 25 %, así como las papas (-20,72 %).

No obstante, las alzas más notorias se han evidenciado en alimentos como la arracacha, el ñame y otros tubérculos (82,03 %), así como los plátanos (41,43 %) y el café y productos a base de café (35,19 %).

Cúcuta fue la ciudad con más inflación

En la variación anual, Cúcuta fue el territorio colombiano con más inflación, pues allí la carestía de los productos registró un aumento del 15,37 %. En el listado de ciudades donde el aumento en el costo de vida se ha hecho más evidente también figuran Sincelejo (14,03 %), Cartagena (13,70 %), Montería (13,58 %), Tunja (13,40 %), Valledupar (13,40 %), Santa Marta (13,38 %), Armenia (13,33 %), Barranquilla (13,21 %), Pasto (13,08 %), Riohacha (12,99 %) y Popayán (12,90 %).

Todas las anteriores se encuentran por encima del promedio nacional. En contraste, las de menor crecimiento en esta materia (aunque siguen manteniéndose en dos dígitos) fueron Villavicencio (11,77 %), Ibagué (11,92 %), Florencia (12,29 %), Pereira (12,41 %), Neiva (12,53 %), Bucaramanga (12,55 %), Manizales (12,57 %), Cali (12,59 %), Medellín (12,68 %) y Bogotá (12,82 %).

En Cúcuta, la división de gasto que más presionó el crecimiento de la inflación fue el transporte urbano, pues en el último año ha registrado un aumento del 7,76 %. Allí, el aumento de los combustibles también ha sido considerable (5,26 %), así como las comidas por fuera del hogar (1,86 %), el arriendo (0,84 %) y la electricidad (1,52 %).

No obstante, en el último año en Cúcuta también hay productos que han caído de precio. El más destacado es el tomate, que se redujo en un 13,37 %, así como la cebolla (-10,47), las papas (-5,74 %), los huevos (-1,77 %) y el gas (-0,83 %).

El Espectador.