Luego de que las últimas semanas tengan como cifras el dolor de más de 70 personas desplazadas por la violencia, y de que en el puerto de Buenaventura se respire un aire de inseguridad tenaz, se realizó una cadena humana que alcanzó los 22 kilómetros de extensión, dada por específicamente las personas que están cansadas de tanto dolor.

El obispo de Buenaventura dijo que el mensaje fue claro “sí a la paz, no a la violencia”. En esta cadena humana estuvo presente el alcalde Víctor Hugo Vidal, quien da un llamado al país diciendo que estas acciones son las que caracterizan a los bonaverenses, no lo que demuestran las bandas criminales.