Las 70 vacunas vinieron procedentes de Emiratos Árabes Unidos en un avión comercial por una pareja china que pretendía comercializarlas. Las vacunas no seguían los protocolos seguros como el mantenerlas a una temperatura constante de -70° y no contaban con la certificación que únicamente el Invima puede efectuar para el transporte, comercialización y suministración de las vacunas.

Al parecer, bajo estudios y análisis, las autoridades encontraron que las vacunas fueron creadas por IMBCAMS en Beijing, China, y en el certificado que traían los pasajeros decía “100 vacunas” pero sólo se hallaron 70. Aún no hay rastros de las otras 30 vacunas.

Los biológicos estaban siendo transportados en una nevera portátil, por lo que su efecto no será el mismo que el de una vacuna certificada, a lo que las autoridades respondieron aseguraron que serán destruidas después de culminar los análisis.  

No habrá repercusiones penales contra la pareja, pero sí habrán multas por tratarse de transporte de mercancía sin la reglamentaria y la documentación correcta.