En la vía a Rozo, en un cañaduzal, se dejaron abandonados unos cilindros cargados con explosivos, los cuales fueron desactivados por miembros de la Policía y el Ejército Nacional, gracias a un llamado que realizó la comunidad al notar artefactos extraños en una de las vías del sector.
Eran tres cilindros de 40 libras cargados con explosivos que estaban a menos de 50 metros del corredor vial, los cuales fueron abandonados por seguimientos, patrullajes y retenes que tenía la Policía de Carreteras en esta zona del Valle del Cauca, según Walter Camilo Murcia, secretario de Convivencia y Seguridad del Valle.
Según el general Miller Nossa, comandante de la Tercera Brigada del Ejército, dichos cilindros serían utilizados en contra de la Fuerza Pública.
