El mes de junio estaba pensado como un mes clave para la reactivación económica en el sector turístico, sin embargo, a pesar de que tuvo buena acogida, no se tuvieron los resultados esperados, a pesar de ser mitad de año y que no hubiera tantas restricciones como en Semana Santa o en Diciembre.

Una gran causa de que no se permitiera aumentar en estas estadísticas fue que más del 90% de los viajeros, que tenían reservas para el mes de junio, las cancelaran por temor a las consecuencias del Paro Nacional.