Gracias a la Ley 1973 de 2019, la Isla turística de San Andrés hará uso de la normativa para prevenir la contaminación por plástico en esa zona colombiana, ya que prohibe el uso, distribución y el ingreso de plásticos de un solo uso, como es el caso de pitillos, vasos, platos, bolsas, cucharas, tenedores, cuchillos, etc.

Las excepciones para poder usar plástico será que los elementos tengan una certificación de ser reutilizados, o que se pueda reutilizar. Además, los establecimientos que pueden hacer uso de las bolsas para entregar sus productos son almacenes de ropa, licorerías, perfumerías, centros de cosméticos y farmacias. También están exentos de esta norma los elementos que sean biodegradables.

La medida buscaría la protección de los distintos ecosistemas que tiene la isla y los cayos alrededor de la misma, reduciendo notablemente el uso del plástico, siendo este uno de los mayores causantes de la contaminación en el mundo.