Una situación compleja vive el departamento de Arauca, en la frontera con Venezuela, donde los constantes enfrentamientos entre las guerrillas del Ejército de Liberación Nacional, ELN, y las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, tienen ya contados casi 70 asesinatos en el departamento en menos de un mes, y alrededor de 1.20 personas que han tenido que huir de la violencia.

La Defensoría del Pueblo, encargada de proteger los Derechos Humanos de las personas, solicitan al Gobierno Colombiano una pronta acción ofensiva para rescatar el territorio de tanta violencia.

En el sitio hay constantes enfrentamientos por el intento de adueñarse del territorio, un lugar clave para el transporte de drogas desde el territorio colombiano hacia Venezuela, desde donde estarían saliendo cargamentos para otras partes del mundo. Esa zona es sitio de guerra por la facilidad de movilidad de un país a otro, ya que sólo están divididos por un río.

La situación está en los ojos del Gobierno Nacional, quienes deberán estudiar la mejor forma de planear una acción ofensiva que deteriore a ambos grupos guerrilleros de extrema izquierda, ya que en cada municipio del departamento de Arauca se teme que hay presencia de estos grupos.