De acuerdo con el candidato, que su oponente dijera que RTVC fijara las condiciones implicaba un desconocimiento a lo exigido por la tutela.

A través de una transmisión de Facebook, Rodolfo Hernández le echó la culpa a Gustavo Petro por la no realización del debate presidencial que ordenó un tribunal para este jueves, determinación judicial en respuesta a una tutela que pidió que los candidatos comparecieran ante los colombianos. Hernández recurrió a argucias legales para decir que tuvo toda la voluntad de asistir al debate, pero fue su contrincante el que lo impidió.

Hacia el final de su diálogo con la ahora exrepresentante Catalina Ortíz, el exalcalde bumangués leyó el documento con el que le dirá a la Sala Civil del Tribunal de Bogotá que cumplió con la decisión de que hicieran su debate, pero fue Gustavo Petro el que lo habría impedido. Hernández hizo una descripción pormenorizada de la supuesta voluntad que tenía para llevar a cabo el debate.

El candidato santandereano señaló que desde que pidió las aclaraciones sobre la tutela, 18 horas después de su notificación, se evidenciaba su voluntad de cumplirlas. Luego, supuestamente habría reafirmado sus intenciones enviando una comunicación con sus representantes para organizar el debate -allí puso condiciones como que debía hacerse en Bucaramanga, que fuera dirigido por ciertas periodistas y que debían incluirse unos temas que claramente están relacionados con el escándalo de los petrovideos-.

Para Hernández, el problema provino de la respuesta de Gustavo Petro, en la que señaló que “yo no pongo condiciones para ese debate. Ninguna. Dejo en manos del sistema de medios públicos RTVC todos los detalles del debate” y que se verían en Bucaramanga. De acuerdo con el candidato, luego de esa respuesta “deduje que (Gustavo Petro) no estaba dispuesto a acatar en estricto rigor lo ordenado por el despacho”.

A consideración del exalcalde bumangués, dicha expresión mostraba que “que prefería desconocer el preciso mandato judicial para convertirlo en una expresión publicitaria contrario al fallo”. El argumento de Rodolfo Hernández estaría fundamentado en que la decisión sobre la tutela señala que las dos candidaturas debían definir reglas, lugar y otros detalles, pero Petro prefirió dejarlo en manos de RTVC, “un tercero”: “demostró que no está dispuesto a acatar el proveído de la forma resuelta por el despacho”.

En la misma comunicación, Hernández cuestionó la expresión “Nos vemos en Bucaramanga, por supuesto”. Para el contrincante de Gustavo Petro, dicho cierre en la carta daba a entender que se cerraba cualquier posibilidad de cumplir con el fallo judicial pues no “no expresó fecha, hora o lugar” para el debate. “Fue el portazo que cerró la posibilidad”, consideró el “ingeniero”.

En su comunicación, Hernández en ningún momento menciona que hubiera hecho alguna respuesta posterior a la carta hecha por Gustavo Petro, lo que significa que guardó silencio por casi 12 horas hasta que se venció el plazo para cumplir con la tutela. Asimismo, omitió la ausencia de su equipo en la reunión que la campaña del Pacto Histórico tuvo con el sistema de medios públicos para cuadrar los detalles del debate.

Hernández finalizó su comunicación diciendo que será el Tribunal de Bogotá el que decida cuál de las dos candidaturas la que desacató la decisión de que tenían que debatir. De esta forma, se cierra la puerta al que iba a ser el primer debate presidencial ordenado por una instancia judicial. Esto debido a que quedan pocos días para la elección y aún iniciándose el incidente de desacato, su resolución sería después del 19 de junio y ya no tendría sentido realizar el debate.