En los últimos años el estilo de vida “fitness” se ha tomado las redes sociales. Es muy común hablar de que nuestros amigos van al gym o a hacer ejercicio en parques… te motivas a ir a entrenar, pero no ves los cambios que deseas en el tiempo que esperabas, lo que te convierte en una de las muchas personas que van al gimnasio por años y siguen en su mismo peso y su misma resistencia.

Por: Editorial El Clavo.

Muchas personas deciden entrar al gym por salud, pero también están quienes van por sólo tomarse la fotografía en el centro de acondicionamiento físico y “taggear” al gym al que se está yendo. Wherever, siempre hay personas de ambos tipos de deportistas que van por meses o por años y no logran sus objetivos planeados. Esto se debe a diferentes factores que El Clavo los resumirá en unos puntos clave para que puedas evaluar si estás cometiendo alguno de estos errores.

Principales errores que los deportistas cometen cuando van al gimnasio:

  1. Falta de diversificación:

Cuando se empieza a entrenar en el gimnasio empezamos con una rutina que, en algunas ocasiones, nos la da el entrenador general del gym, o a veces tomamos ideas de rutina sacadas de las RR.SS (redes sociales). El problema es cuando se pasa mucho tiempo con la misma rutina y sin variar, siquiera, el peso.

Hay que tener en cuenta el objetivo que queremos plantearnos en el gym, si es ganar volumen o masa muscular, o si quieres tonificar… para ambos hay distintos ejercicios y una exigencia muy distinta en temas de peso y de repeticiones. Plantea tu objetivo y ejercítate con respecto a esa meta.

  • Alto consumo de alcohol:

Tener distintos metales o toxinas en nuestro cuerpo hace que las células grasas no funcionan correctamente y ralenticen el proceso de sanación de los músculos y no permitan que crezcan como se espera.

“Cuando bebemos, nuestro cuerpo digiere un veinte por ciento en el estómago y el resto en el intestino delgado (…) lo que no se elimina se queda en nuestro cuerpo adhiriéndose a los adipocitos o células grasas, es por esto que la gente con más cantidad de grasa es menos susceptible a que les afecte” asegura el portal web esquire.

Al ocurrir esto, se suprime la producción de testosterona, hormona encargada del desarrollo de masa muscular, por lo que ralentiza también su recuperación y la pérdida de masa muscular.

  • No te recuperas:

A veces, cuando se tiene demasiada motivación y se es muy impaciente, entrenamos los 7 días de la semana… e incluso hay personas que entrenan dos veces al día casi todos los días. Esto es supremamente dañino para ver los resultados esperados que se plantea cada deportista.

Según el portal web Polar, “Además de las rutinas de recuperación postentrenamiento, los días de descanso y la recuperación activa, el sueño es uno de los factores clave en la recuperación. Durante tu fase de sueño, la producción hormonal está en su pico para que la cantidad y la calidad afecten claramente tus resultados”.

  • No consumes las calorías necesarias:

Hay un gran mito que la mayoría de personas cree, y es que como se está en el gimnasio se debe dejar de comer tanto, e incluso alimentarse mucho menos. Si se quiere lograr el objetivo de ganar volumen de masa muscular, las calorías que se consumen deben de ser acordes a los entrenamientos que se están manejando. Incluso, la creación de una rutina de dieta de al menos unas cinco comidas (cada tres horas entre ellas) es lo recomendable… pero ojo, no es alimentarse a punta de grasa o de carbohidratos únicamente, sino crear una dieta alta en proteína y con la cantidad calórica necesaria.

“Un excedente calórico de 300 a 500 calorías por día es suficiente, de lo contrario también acumularás grasa y conseguirás ganar peso, pero por las razones equivocadas (…) Planifica tus comidas poniendo énfasis en que tu cuerpo reciba los suficientes macronutrientes (proteínas, hidratos de carbono y grasas) y micronutrientes (vitaminas, oligoelementos y minerales)” según el portal web Foodspring.

  • Estrés emocional:

Un factor del que casi no se habla es el momento emocional por el que se está pasando… si estás entrenando duro pero no estás concentrado en tus músculos sino en tu falta de dinero, un desamor, problemas familiares o educativos, tu mente no va a prestar la atención necesaria a la carga física que estás teniendo en el momento de la rutina…

Hay estudios que mencionan que el gimnasio ayuda a liberar algunas hormonas que liberarán el estrés que estás manejando en el momento. Incluso, hay estudios que avalan que el gym ayuda a tratar la ansiedad y la depresión, sin embargo, ralentiza los procesos de cambios físicos que quieres tener en el momento.

Según el diario El Tiempo, también es probable que, si se está enojado o molesto, hacer ejercicios pueden acelerar las opciones de sufrir de un infarto. Así que hay que saber manejar un equilibrio emocional cuando se vaya al gimnasio.

Todo esto puede afectar por qué no has cambiado tu físico si llevas varios meses entrenando. Recuerda, de igual manera, que es mejor siempre tener el apoyo y la coordinación de un profesional o un entrenador del gym para que te ayude a lograr los objetivos propuestos. También, si tienes la opción de poder ir a ver a un nutricionista, sería ideal poder equilibrar lo que se quiere lograr con la alimentación que debes consumir.

Y tú… ¿Hace cuánto estás en el gym y por qué crees que has visto o no los cambios reflejados en tu cuerpo? Cuéntanos en los comentarios.