El presidente aseguró que ha visto reflejada ‘una de las mayores injusticias sociales’ en ellos.

Una ola de disturbios se vivió en pleno centro de la capital del país en medio de unas manifestaciones de los indígenas de la comunidad embera. Según quedó registrado en videos, intentaron tomarse el edificio de Avianca y se enfrentaron con el Esmad y miembros de la Policía Metropolitana. 

Los manifestantes eran parte de las Autoridades Indígenas en Bakatá (AIB), proceso político que reúne a 15 comunidades, y que en el pasado ocuparon el parque Nacional durante ocho meses.

Tras los violentos episodios, el presidente Gustavo Petro visitó a los uniformados de la Policía que resultaron heridos con palos y piedras.

“Rechazo y condeno los actos vividos hoy en Bogotá. Varios miembros de la Fuerza Pública y civiles resultaron heridos. Nunca será protesta la agresión a un policía”, escribió en su cuenta de Twitter.

Además, calificó a los agresores como violadores de los derechos humanos por arremeter contra personas en estado de indefensión.

Compromisos de Petro con comunidades indígenas

El mandatario citó a los líderes de la protesta para una reunión extraordinaria en la Casa de Nariño. Al encuentro asistieron Laura Sarabia, jefa de gabinete; Alfonso Prada, ministro del Interior; Patricia Tobón, directora de la Unidad para las Víctimas; y Giovani Yule, director de la Unidad de Restitución de Tierras.

Producto de esta primera conversación, el presidente Petro hizo un recuento de las dificultades que afrontan las comunidades y por las cuales han salido a reclamar a las calles de Bogotá.

“Hace un mes no tienen agua potable, viven hacinados más de 1.200 personas, donde solo caben 400. Han visto morir 21 de sus integrantes, la mayoría niños”, puntualizó.

Expresó que son víctimas de discriminación y trato indigno, pues, por ejemplo, “los funcionarios no tienen la educación para lograr entenderlos”. Incluso, según él, son catalogados por algunos ciudadanos como terroristas.

“Han visto morir de hambre, de VIH, de epidemias, de falta de atención a sus propios hijos. Yo creo que hoy he visto una de las mayores injusticias sociales. Un Estado que vuelve víctimas a las víctimas”, agregó.

En concreto, Petro se comprometió a cumplir los acuerdos que el gobierno anterior había alcanzado con las comunidades étnicas, pero no especificó cuáles, por lo que se pensaría haría referencia a acceso a salud, educación, trabajo y reubicación de sus viviendas. Además, dijo que buscará la paz en el Alto Andagueda, de Chocó, donde se asientan cientos de ellos.

“El empoderamiento de su reserva será fundamental para solucionar un problema de incomprensión étnica en el centro de Bogotá”, finalizó mediante su cuenta de Twitter.

El Tiempo